Rutina

Cómo: Moja tu rostro con agua tibia. Aplica una pequeña cantidad de limpiador (tamaño de una moneda) en tus manos, frótalo para hacer espuma y masajea suavemente tu rostro en movimientos circulares durante 30-60 segundos, enfocándote en la zona T (frente, nariz, barbilla). Evita el área de los ojos.

Por qué: Elimina el exceso de grasa, sudor y suciedad acumulados durante la noche.

Finaliza: Enjuaga con agua tibia y seca con una toalla limpia dando toques suaves (sin fr

Cómo: Con el rostro seco, aplica 3-4 gotas de sérum en tus dedos. Extiéndelo suavemente por el rostro y cuello, dando ligeros toques para que se absorba. Espera 1-2 minutos antes del siguiente paso.

Por qué: El sérum aporta hidratación profunda y principios activos que preparan la piel para la crema.

Tip: Si el sérum contiene ingredientes como vitamina C, es ideal para el día por su protección antioxidante.

Cómo: Aplica una cantidad del tamaño de un guisante en tus dedos y extiéndela por el rostro y cuello con movimientos ascendentes. Masajea hasta que se absorba completamente.

Por qué: Sella la hidratación, protege la barrera cutánea y mantiene la piel suave durante el día.

Extra: Si vas a salir, considera usar una crema hidratante con SPF (o aplicar un protector solar después) para protegerte del daño UV.